Valdés 1537

Juan de Valdés: «Passos de la introducion de Juan de Valdes al salterio traduzido en Castellano» (1537)

El Salterio traduzido del hebreo en romance castellano por Juan de Valdés. Ahora por primera vez impreso. Ed. de Eduard Boehmer (Bonn, Carlos Georgi, 1880), 165–170

Fuente: Nora Catelli & Marietta Gargatagli, El tabaco que fumaba Plinio. Escenas de la traducción en España y América: relatos, leyes y reflexiones sobre los otros, Barcelona, Ediciones del Serbal, 1998, 166–168.

 

[166] A la illustrissima señora la señora Julia de Gonzaga.

[…] pareciendome que por hazeros muy pia os servirá mucho la licion de los salmos de David, os los he puesto en Romance Castellano, sacandolos de la letra [167] Hebrea casi palabra por palabra en quanto lo ha sufrido el hablar Castellano, y aun me he atrevido mas vezes a la lengua Castellana, hablando impropiamente, que a la Hebrea, alterandola; esto he hecho assi, pareciendome cosa conveniente y justa que las cosas escrittas con espiritu santto sean trattadas con mucho respetto. He mezclado del mio algunas palabras a fin que la letra lleve mas lustre, vaya mas clara y mas sabrosa; estas, porque sean conocidas, van escrittas con tinta colorada, pretendiendo que se les ha de dar el credito que se deve dar a palabras de hombre, haziendo diferencia ente ellas y las que son de spiritu santto. Es bien verdad que por la mayor parte las palabras que van escrittas con tinta colorada se entienden de suyo en letra Hebrea. […] Llos salmos tienen mas necessidad de buena traslacion que las epistolas, por estar ellos en los libros Latinos mas impropiamente trasladados que no estan ellas. […] De lo que diré ahora, se servirá v. s. para entender algunas cosas que pertenecen solamente a la letra de los salmos.

De los titulos, que los salmos tienen en los libros Hebreos, he puesto solamente los nombres o del autor o del cantor o de aquel por quien se compuso, como será dezir: de David, de Asaf, de los hijos de Corah &c., dexando todo lo demas, porque aun los propios Hebreos lo entienden quien de una manera y quien de otra. […]

Por adonde en la letra Hebrea sta el santissimo nombre de Dios, al qual, porque tiene quatro letras en el Hebreo, los Griegos llaman tetragrammaton, y por el qual los Hebreos, teniendo por cosa illicita pronunciarlo, acostumbran leer Adonai, y los Griegos (pienso que por no hallar como esprimir la sinificacion del divinissimo nombre) siguiendo lo que los Hebreos leen, traduzen Kirios, y los Latinos, siguiendo la licion de los Hebreos y la traducion de los Griegos, traduzen Dominus, yo he traduzido señor, escriviendolo con letras grandes, pretendiendo que importa mucho para la inteligencia del salmo saber adonde sta el tetragrammaton. Lo mismo he hecho en el ja que va todo a uno, porque aveis de saber que en el nombre sta casi esprimido el propio ser de Dios que por si es y da ser y da vida a todas las cosas que son y viven, como se entiende por la respuesta que dio Dios a Moisen Exod. 4. En algunas partes, adonde me ha parecido, he dexado el mismo vocablo, como se puede escrivir con nuestras letras, poniendo jehova. Pero advertid que, hallando escritto señor con letras grandes, aveis de hazer cuenta que sta este mismo nombre, porque haze mucho al caso para la inteligencia del salmo. Como será en aquello: Dixo el señor a mi señor, salmo 110. Adonde hallareis escritto señor, con letras pequeñas, entended que en el Hebreo sta adonai que significa señor, amo o patron. Porque los Hebreos estos vocablos como son el, elim elohim, por los quales ordinariamente se traduze Dios, no solamente lo atribuyen a Dios, pero también a angeles, reyes, principes, juezes y personas illustres, assi como en el verso 5 del salmo 8, adonde por elohim unos entienden angeles y otros entienden Dios; y como en el verso primero del salmo 29, adonde por elim unos entienden Dios y otros entienden personas illustres; y como en el verso primero del salmo 50, adonde por el unos entienden Dios y otros entienden fuerte, illustre. Yo en ellos he guardado esto que, adonde ay, he traduzido [168] Dios; terneis este aviso, que, adonde vereis el vocablo Hebreo, lo podreis atribuir, como digo que lo atribuyen los Hebreos, según parecerá que es mas a proposito.

Los Hebreos tienen tres vocablos con que nombran al hombre: is, adam, enos, y casi por el ordinario atribuyen el primero a las personas valerosas y nobles, por el qual siempre yo he traduzido varon, y el segundo a las personas baxas, y por el yo he puesto hombre, y el tercero a las personas miserables, adonde yo por hazer diferencia he quitado la aspiración y dicho ombre. Assi como en el verso segundo del salmo 49, adonde por hijos de varon entiende hombres nobles, y por hijos de hombre entiende hombres baxos, lo qual da mucha claridad a la inteligencia de todo el salmo; y como en el verso 4 del salmo 8, adonde primero pone ombre, denotando la miseria del hombre, y luego pone hijo de hombre, denotando su baxeza. Aprovecha para la inteligencia de los salmos este aviso, bien que no siempre se guarda esta diferencia.