Jünger, Ernst (Heidelberg, 1895–Riedlingen, 1998)
Escritor alemán. Se alistó como voluntario en el ejército al estallar la Primera Guerra Mundial, cuyas vivencias recogió en Im Stahlgewittern (1920). Tras la contienda se aproximó a grupos revolucionarios de derechas; llegó a coquetear intelectualmente con el nazismo. La visión profética de los horrores del régimen, descritos en Auf den Marmorklippen (1939) en clave críptica pero evidenciable, causó los recelos de los dirigentes, que prohibieron sus obras en 1942. Participó como oficial en la Segunda Guerra Mundial. Más tarde fue condenado al ostracismo por los aliados, aunque ya en 1948 publicó Heliopolis. Poco a poco fue recuperando su imagen pública y consiguió numerosos galardones. Strahlungen (1949) y Eumeswil (1977) son las grandes obras de su postrera hora creativa, acompañada de numerosas incidencias vitales, la droga entre otras. En casi todas ellas desempeña un papel importante lo autobiográfico. Desde el punto de vista literario, el perfil estilístico de Jünger constituye un espécimen propio de difícil catalogación.
Casi toda su obra está traducida al castellano. Tempestades de acero se tradujo ya en 1930 (B., Iberia) por Mario Verdaguer. Hubo que esperar hasta los años 60 para que aparecieran nuevas traducciones: Sobre los acantilados de mármol, en versión de Tristán La Rosa (B., Destino, 1962). Más tarde se publicaron Diario de guerra y de ocupación, en versión de Ana M.ª de la Fuente (B., Plaza & Janés, 1972), Eumeswil de la mano de Marciano Villanueva (B., Seix Barral, 1980) y El problema de Aladino, traducido por Juan Conesa (M., Cátedra, 1987). Andrés Sánchez Pascual es uno de sus más distinguidos traductores: El trabajador: dominio y figura (1990), Radiaciones (1992–1995), Tempestades de acero (1993), La tijera (1993), todas ellas publicadas por Tusquets de Barcelona. En la misma editorial había aparecido con anterioridad El tirachinas (1987), en versión de J. José del Solar. Enrique Ocaña nos ha suministrado Anotaciones del día y de la noche (Tusquets, 2013), colección miscelánea de los primeros años del autor, que así va completando su perfil bibliográfico en español. El centenario de la Gran Guerra quizás haya provocado la edición o reedición de sus obras bélicas, que no belicistas. Tal, El diario de guerra (Tusquets, 2013) en traducción de Carmen Gauger.
En catalán se han traducido El problema d’Aladí por Núria Roig (B., Proa, 1990), así como En els espadats de marbre por Francesca Martínez (1990) y Diaris de París por Joan Fontcuberta (1993), ambas en Edicions 62 de Barcelona.
Miguel Ángel Vega