Twain, Mark

Twain, Mark (Florida, 1835–Redding, 1910)

Novelista, ensayista y periodista estadounidense, llamado en realidad Samuel Langhorne Clemens. Escritor costumbrista y, sobre todo, irónico observador de la sociedad de su tiempo, pasó su niñez y adolescencia en las riberas del Misisipi, lo que, unido a su experiencia posterior como piloto en un barco fluvial, fue la fuente de creación tanto de su seudónimo como de sus dos novelas más conocidas, The Adventures of Tom Sawyer (1876) y The Adventures of Huckleberry Finn, Tom Sawyer’s Comrad (1884). Durante la Guerra de Secesión abandonó el ejército confederado y se trasladó a Nevada, donde conoció el mundo de los mineros. Trabajó luego como periodista en diversos lugares del país. En 1867 publicó su primera colección de relatos humorísticos, The Celebrated Jumping Frog of Calaveras County and Other Sketches, que le dieron cierta fama, consolidada con la aparición de su primera novela. Publicó libros de viajes, artículos de opinión y, en 1889, A Connecticut Yankee in King Arthur’s Court, irónica ucronía acompañada de las anticlericales ilustraciones de Dan Beard. A partir de entonces sus críticas se tornaron más agrias y su postura política, más radical. Sus dificultades financieras, ocasionadas por sus poco meditadas inversiones, y, sobre todo, la muerte de su esposa e hijas quedan reflejadas en el hondo pesimismo de sus últimas novelas, como The Man that Corrupted Hadleyburg (1899), o de su obra póstuma, The Mysterious Stranger: A Romance (1916).

Mientras en su país el aprecio por su obra no sólo se mantuvo tras su muerte, sino que lo consagró como uno de los autores fundamentales de la literatura estadounidense, su aparición en España fue relativamente tardía, catalogado a menudo como creador de relatos humorísticos y de aventuras, más apropiados para adolescentes. Dos etapas se registran en la recepción de Twain en España. La primera llega hasta el final de la Guerra Civil y durante ella se publicó buena parte de la obra del autor. La primera edición española fue una colección de ocho relatos, editados en 1895 con el título Bosquejos humorísticos (B., J. Roura & A. del Castillo); siguieron otras tres antologías similares hasta 1903, fecha de la primera traducción de su novela sobre las aventuras de Tom Sawyer, Aventuras de Masin Sawyer (M., Viuda de Rodríguez Serra, 1903), en traducción de José Menéndez Novella; era el n.º 1 de la colección «Biblioteca Humorística». Traductor y colección dan pistas suficientes sobre las características del tratamiento dado al autor en sus primeros tiempos en España: de una parte como autor humorístico y de otra, la sospecha del uso de traducciones francesas intermedias como textos fuente para las versiones españolas, pues Menéndez Novella tradujo habitualmente del francés. En sentido parecido cabe referirse a  El prometido de Aurelia. Narraciones humorísticas (M., Imp. de J. de Palacios, 1904) por Augusto Barrado o Viajes absurdos y aventuras inverosímiles (M., Castilla, ca. 1910) por Fernando de la Milla, presentadas en ambos casos como  «traducción directa del inglés».

Los títulos de relatos humorísticos que intentan atraer al lector se utilizaron hasta bien entrado el siglo XX. Así, en 1920 se tradujo Pudd’nhead Wilson: A Tale, novela detectivesca con implicaciones racistas, con el título de Y la burra entre las coles (M. Variorum 1920) a cargo de Antonio Porras y también la colección Narraciones humorísticas (M., Rivadeneyra) por Carlos Pereyra, quien se convertiría en el primer traductor de Huckleberry Finn, con la publicación de Las aventuras de Huck (M., Caro Reggio, 1923) en dos volúmenes.

En el primer tercio del siglo XX se advierte una mayor presencia de Twain en la prensa periódica española, en la que apareció un buen número de sus cuentos y artículos traducidos, con un desfase temporal inferior al que se dio en la edición de novelas; en tales versiones, no obstante, se observan las mismas interferencias causadas por las traducciones francesas. A partir de los años 40 hay un cambio en la tendencia traductora: un creciente número de editoriales publicó en castellano la obra de Twain, habitualmente las novelas más conocidas, entre ellas Las aventuras de Huckleberry Finn, en sucesivas versiones de Guillermo López Hipkiss (B., Molino, 1944), Amando Lázaro Ros (M., Aguilar, 1949), Elvira Vázquez Gamboa (B., Éxito, 1952) y M.ª Teresa Monguió (B., Juventud, 1957); Un yanqui en la corte del rey Arturo, traducida por Pedro Elías (B., Lauro, 1943; varias reed.), por Javier de Zengotita (B., Reguera, 1945) y por Víctor Scholz (B., Mateu, 1958); El príncipe y el mendigo por Antonio Valencia en 1942 (M., La Nave), y posteriormente por Rafael Ballester Escalas en 1958 (Mateu); El niño malo y el niño bueno por Fernando Trías Beristain (B., s. i., 1943); Juana de Arco por María del Pilar Ganosa (M., Siglo XX, 1949).

Es frecuente que una única traducción sea publicada por varias editoriales; las de Simón Santainés, por ejemplo, aparecieron durante la posguerra al menos en cuatro distintas en un lapso de quince años, y han continuado reeditándose. Se observa también una marcada tendencia a publicar a Twain en colecciones destinadas a un público juvenil, tendencia que se acentuó en los años 60, cuando aparecieron innumerables adaptaciones y versiones abreviadas. De hecho, ha habido que esperar hasta los años finales del siglo XX para hallar ediciones anotadas de la obra de Twain: destaca en esta parcela Cátedra con Las aventuras de Huckleberry Finn (1998), en edición a cargo de Juan José Coy y traducción de Doris Rolfe y Antonio Ferres, y la de Un yanqui en la corte del rey Arturo (1999), en edición de Carme Manuel y traducción de Elizabeth Power. Es también reseñable, por ejemplo, la publicación de Viaje alrededor del mundo, siguiendo el Ecuador (B., Laertes, 1992) por Marta Pérez.

En el presente siglo han sido abundantes las publicaciones de obras de Twain: así, Diccionario de Mark Twain (M., Valdemar, 2003) por Rafael Santervás; Cartas desde la tierra (M., Trama, 2006) por Christine Monteleone; Reflexiones contra la religión (Trama, 2007) por Mario Muchnik; Cartas de amor (M., Funambulista, 2011) por Alma Fernández Simón; El gato de Dick Baker (M., Nórdica, 2012) por Íñigo Jáuregui; Tres mil años entre los microbios (Colmenar Viejo, Biblioteca del Laberinto, 2014) por Paco Arellano. Para algunas obras existen varias versiones: así, de El diario de Adán y Eva están las de Cristina García Ohlrich (Trama, 1996), R. Santervás (Valdemar, 2005) y Antonio Pujol (Algete, Mestas, 2015); hay asimismo dos ediciones diferentes de Cuentos humorísticos, por A. Barrado (M., Akal, 1985) y por Carme Font (B., Navona, 2010). Algunas retraducciones se caracterizan por ligeras variaciones en los títulos: así, El billete del millón (Murcia, Bibliotex, 1999) por José Díaz, El billete de 1000000 libras (Palencia, Menoscuarto, 2000) por A. Lázaro Ros o El billete de un millón de libras (M., Gadir, 2014) por Elizabeth Falouir Arcambault. En 2010 Debolsillo (Barcelona) publicó el volumen Cuentos selectos, con veinticuatro relatos, en versiones de Miguel Temprano García y otros traductores. En 2016 se publicó otra antología, Cuentos completos (B., Penguin Clásicos), que ampliaba la anterior, pues incluía sesenta, también traducidos por M. Temprano y otros. Aunque no se publicó en España, cabe destacar la aparición en 2012 de Cuentos completos en cinco volúmenes, editados por Claridad (Buenos Aires) y con traducciones de Lucas Bidon, Elizabeth Casals, Susana Celia, Daniel Gigena y Guadalupe Marey.

Las primeras versiones al catalán aparecieron en 1918 en la Editorial Catalana, un proyecto de Josep Carner con el que pretendía acercar a los jóvenes las mejores obras de la literatura universal. Él mismo firma las versiones de Les aventures de Tom Sawyer y L’elefant blanc robat. Durante los años 30 el editor Josep Janés acogió varias obras de Twain en catalán, tarea que se interrumpió durante la posguerra hasta 1955, si bien durante ese período continuó publicando traducciones castellanas del autor americano. Las traducciones de Carner han sido objeto de frecuentes reediciones: así, por ejemplo, Les aventures de Tom Sawyer se publicó en Selecta en 1935, corregida de errores tipográficos, y en La Magrana en 1982. Además de la versión de Carner cabe mencionar también la firmada por M. Antònia Oliver (B., La Galera, 1982). En 1934 apareció Tom Sawyer, detectiu, en versión de C. A. Jordana. Les aventures d’Huckleberry Finn, obra de Joan Fontcuberta, se publicó en 1979 en la editorial 7×7 y dos años después en La Magrana. Ese mismo año vio la luz el relato Història del petit Esteve Girard (Parramon, 1979), en versión de M. Aurèlia Capmany, y en 1981, El bitllet d’un milió de lliures (Laia), de Maria Cugueró. En 1983, la editorial La Galera publicó El príncep i el captaire, por Carme Serrallonga, y en 1999 Quaderns Crema Un ianqui a la cort del rei Artús, por Joan Sellent.

También se han publicado en catalán obras menos conocidas de Twain, como L’home que va corrompre Hodleyburg (Bromera, 1993), por Josep Marco; Un doble misteri (B., Laertes, 1994) por Montserrat Canyameres; Un assassinat, un misteri i un casament (B., La Magrana, 2001) por Ernest Riera. En 2006 Zorro Rojo (Barcelona) editó el relato Consells per a les nenes bones por Neus Aymerich y en Angle Editorial (Barcelona) apareció Els diaris d’Adam i Eva por Ernest Riera.

En euskera se cuenta con Tom Sawyer–en abenturak por Guillermo Echeverria (Donostia, Lur, 1979) y por Iñaki Mendiguren (Donostia, Elkar, 1995). En 2012 se publicó una nueva versión, hecha por I. Mendiguren y Sarah Turtle para la editorial Erein (Donostia), que les valió en 2013 el Premio Euskadi a la mejor traducción al euskera. También se han publicado Huckleberry Finn–en abenturak (Euba, Ibaizabal, 1990) por Aintzane Ibarzabal, Yankee bat Arturo erregearen gartean (Bilbao, Desclée de Brouwer, 2008) por Miren Esturo Errazti o Hiru kontakizun [Tres historias] (Donostia, Euskal Liburu, 1994) por Koro Navarro.

En gallego, una de las primeras traducciones fue la de As aventuras de Tom Sawyer (Vigo, Xerais, 1985) realizada por Xosé Ramón Díaz Fontao, a la que siguieron las de Diario de Eva y Retallos do diario de Adán por Benigno Fernández Salgado para Positivas (Santiago de Compostela) en 1991 y 1992, respectivamente. A ellas se han unido más tarde Un ianqui na corte do rei Arturo (Xerais, 1996) por Abel López, Contos de Mark Twain (Lugo, Tris Tram, 2006) por Marta Cuba, Cartas desde a terra (Pontevedra, Factoría K, 2011) por Carlos Acevedo, O forasteiro misterioso (Santiago de Compostela, Hugin e Munin, 2012) por Alejandro Tobar, O príncipe e o esmoleiro (Vigo, Trymar, 2013) por Pablo María Morell o Una historia detectivesca de dobre canón (Factoría K, 2018) por Antia Veres Gesto.

 

Bibliografía

Ian Craig, «Las aventuras de Tom Sawyer en la España de Franco», Educación y Biblioteca 171 (2009), 18–24.

Juan José Lanero & Secundino Villoria, «La llegada de Mark Twain a España. Aventuras, bosquejos, cuentos, hazañas y pesquisas», Livius 10 (1997), 103–120.

Pep Molist, «Mark Twain, en català», El País, 14/12/2006.

Marisa Fernández López
[Actualización por Luis Pegenaute]