Guimarães Rosa, João (Cordisburgo, 1908–Río de Janeiro, 1967)
Novelista y narrador brasileño, uno de los principales renovadores de la prosa portuguesa del siglo XX, con una obra literaria notable por su rigor formal, su hondura y sus innovaciones sintácticas y léxicas. Su infancia transcurrió en el estado de Minas Gerais, espacio mítico para su universo narrativo y para los giros idiomáticos y neologismos que caracterizan su prosa. Manifestó enorme afición a la naturaleza y a las lenguas, que llegó a dominar en gran número; estudió medicina y ejerció la profesión durante varios años. En 1934 ingresó en la carrera diplomática; siendo cónsul adjunto en Hamburgo, fue recluido en un campo de concentración cuando Brasil declaró la guerra a Alemania. Posteriormente, fue secretario de embajada en Bogotá y consejero en París, y en 1958 fue ascendido al rango de embajador. Uno de sus últimos puestos fue el de director del Servicio de Demarcación de Fronteras. Obtuvo reconocimiento literario en 1956 con la publicación de Grande sertão: veredas y Corpo de baile. A partir de entonces se convirtió en un autor de culto, admirado y reconocido tanto en Brasil como en el extranjero. Falleció a los pocos días de haber leído su discurso de ingreso en la Academia Brasileña de Letras.
Su conocimiento en España se produjo a través de las páginas de la Revista de Cultura Brasileña, que dirigió desde 1962 a 1971 el poeta Ángel Crespo, que fue asimismo el primer traductor de Rosa al castellano en la Península. En el número de esta revista correspondiente a diciembre de 1963, Crespo publicó un artículo acerca del autor mineiro y una traducción de su relato «El caballo que bebía cerveza», perteneciente a su libro Primeiras estórias. También del mismo libro y en la misma revista se tradujo en 1965 el cuento La tercera margen del río, que realizó Rodolfo Alonso. En 1967, coincidiendo con la primera edición de Gran sertón: veredas (B., Seix Barral), la Revista de Cultura Brasileña dedicó al escritor un número especial donde, además de glosar las dificultades y excelencias de dicha traducción, se reproducían algunos fragmentos de los relatos La ceguera, del libro Sagarana; Cara–de–Bronce, de Corpo de baile; El juicio de Zé Bebelo, de Grande sertão: veredas, y los cuentos íntegros Los hermanos Dagobé y Ninguno, ningunas, de Primeiras estórias.
Por lo que se refiere a la versión de Á. Crespo del Grande sertão: veredas, que el propio Rosa calificó de magnífica e insuperable, no siempre fue vista así por algunos escritores, como es el caso de Mario Vargas Llosa, que llegó a calificarla de «fracaso excepcional». Esta diversidad de opiniones sólo es posible frente a una prosa tan compleja y llena de innovaciones lingüísticas, que exige al traductor crear un nuevo lenguaje para poder conservar su riqueza léxica y gramatical, su originalidad estilística y su indudable profundidad. Por su parte, la traducción de esta novela a la lengua catalana la realizó en 1990 Xavier Pàmies con el título Gran sertão: riberes (B., Edicions 62).
En 1968, Virginia Fagnani Wey tradujo para Seix Barral el conjunto de relatos cortos Primeras historias, que, como en el caso de Crespo, fue supervisada y aplaudida por el propio autor. Más de diez años después, en 1981, la editorial Alfaguara (Madrid) publicó Manolón y Miguelín, primera parte del conjunto de relatos que componen Corpo de baile, en la traducción de Pilar Gómez Bedate, que intentó trasladar las características del lenguaje de Rosa a un castellano fluido. El resto de los relatos que componen el conjunto de Corpo de baile fue traducido por Estela dos Santos para Seix Barral: Urubuquaquá, cuyo título original es No Urubuquaquá, no Pinhém, y Noches del sertón (Noites do sertão), ambas en 1982.
Cabe destacar también algunas traducciones de relatos en revistas españolas como la que Héctor Olea realizó de La tercera margen del río (A terceira margem do rio), aparecida en Quimera (septiembre de 1981), en la que se reinterpreta el texto con un afán poético semejante al de Crespo en el Gran sertón. Sin embargo, la traducción más literal de V. Fagnani Wey sigue aún conservando un indiscutible atractivo frente a las originalidades estilísticas del escritor brasileño. También hay que destacar la que Valquiria Wey, hija de Virginia, ha realizado del relato Mi tío el jaguareté, publicado en la Revista de Cultura Brasileña en febrero de 2007 y que, dada la dificultad del texto, supone un esfuerzo y una dedicación excepcional.
Bibliografía
Marta Susana García, «O estilo original de um autor e duas traduçőes ao español: João Guimarães Rosa e seu Grande sertão: Veredas», Mutatis Mutandis 7:2 (2014), 238-252.
Pilar Gómez Bedate, «Notas sobre las versiones y traducciones de Grande sertão: veredas», Revista de Cultura Brasileña 1.ª serie, 21 (1967), 188–208.
Benedito Nunes, «Guimarães Rosa y su traducción» en O dorso do tigre, São Paulo, 1976; reproducido en Revista de Cultura Brasileña 2.ª serie, 5 (1976), 26–57.
Mario Vargas Llosa, «¿Epopeya del sertón, Torre de Babel o manual de satanismo?» Amaru 2 (abril 1967), 70–72; reproducido en Revista de Cultura Brasileña 2.ª serie, 5 (1976), 100–107.
Antonio Maura
[Actualización por Francisco Lafarga]