García de Arrieta, Agustín

García de Arrieta, Agustín (Cuéllar, ca. 1775–París, 1835)

Escritor y traductor en lengua castellana. Tras graduarse de bachiller en Filosofía y Teología, en 1798 se incorporó como oficial a la biblioteca de los Reales Estudios de San Isidro, de la que fue director desde 1814 a 1816. Al ser devuelto el centro a los jesuitas, durante los cuatro años siguientes prestó sus servicios en la Biblioteca Real. Restablecido de nuevo por el gobierno liberal, en 1820 volvió a su antigua plaza, a la que dos años después se sumaría la de bibliotecario mayor de la recién fundada Universidad Central (1822), cuya sede se fijó en los mismos Reales Estudios. Desposeído de su cargo por sus ideas liberales, en 1823 se exilió a París, donde pasó el resto de su vida entregado a sus trabajos cervantinos. Fue miembro de la Real Academia Española y de la Academia Latina Matritense.

Tras ver frustrado el intento de editar un Ensayo sobre la moral de los deístas y naturalistas, al que se negó la licencia por «el peligro que podrá ocasionar su lectura a los ignorantes», publicó en 1793 (M., B. Cano) una traducción anónima del italiano, Las leyes eclesiásticas sacadas del Nuevo Testamento –prohibida por la Inquisición, como antes lo había sido la versión francesa–, y luego, en la misma imprenta, la de la Introducción a la Sagrada Escritura o aparato para entender con mayor facilidad y claridad la Sagrada Biblia en lengua vulgar, escrita en latín por el P. Bernard Lamy (1795). Estimulado por un formato editorial muy frecuentado en la Europa de las Luces, publicó en 1796 (M., B. Cano) El espíritu del Telémaco, recopilación de máximas y reflexiones políticas y morales sacadas de Las aventuras de Telémaco de Fénelon, y traducidas directamente del original (no de la versión española, que consideraba «malísima»). Ordenadas alfabéticamente por materias e ilustradas con varias notas, las ofrece al público para que pueda disponer cómodamente de toda su parte instructiva. Con este mismo diseño publicó en 1814 El espíritu de Miguel de Cervantes y Saavedra, o la filosofía de este grande ingenio, presentada en máximas, reflexiones, moralidades y agudezas de todas especies, y sobre todos los asuntos más importantes de la vida civil, que tiene el interés añadido de ir acompañada de la primera edición de La tía fingida, a partir del manuscrito que se hallaba en la biblioteca de los Reales Estudios.

Su traducción de más largo empeño fue la de los Principios filosóficos de la Literatura o Curso razonado de Bellas Letras y de Bellas Artes del padre Charles Batteux, que en nueve volúmenes fue dando a la estampa el impresor Sancha en Madrid, a razón de uno por año, entre 1797 y 1805. Una obra que es mucho más que una traducción, porque, planteada para satisfacer la necesidad que había en España de una obra metódica y filosófica que enseñase «con discernimiento, solidez y buen gusto todos los principios de las Buenas Letras en general y en particular», como en buena medida es la de Batteux, pero que acogiera también las aportaciones más valiosas y actualizadas en la materia, y que fuera «nacional» en lo posible, el texto original aparece ampliado con una parte nueva y aderezado con una larga serie de adiciones de variada procedencia (Luzán, Mayans, Montiano y Luyando, Llampillas, Vicente de los Ríos, Rubín de Celis, Antonio de Capmany, Colección de poetas españoles, Rollin, Saint–Évremond, Voltaire, Saint–Lambert, Napoli–Signorelli, Marmontel, Blair, La Harpe, La Motte, Fontenelle, Grimm, Beauzée, Jaucourt, Sulzer, Bellin, etc.), junto con notas críticas y suplementos del traductor sobre la literatura española en sus diversos géneros. Todo ello, que altera sustancialmente el carácter del original y duplica su volumen, le permite rectificar a Batteux, proponer su propio ideario teórico y expresar sus valoraciones literarias. A raíz de la crítica que José Luis Munárriz, traductor de las Lecciones sobre la Retórica y las Bellas Letras (1798–1799) de Hugh Blair, hizo de la obra en el periódico Variedades de ciencias, literatura y artes (1805), redactó una extensa Carta apologética de la traducción de los Principios de Literatura de Mr. Batteux (1805), para satisfacer sus reparos e imputaciones y poner de manifiesto a su vez los errores que su impugnador cometía en la suya.

Fruto de su interés por el teatro son dos refundiciones, inéditas, de Lope de Vega, La bella malmaridada y La esclava por amor, así como tres traducciones de piezas alemanas: El celoso confundido, una comedia repetidamente representada en 1801 y en los años sucesivos, y sendas versiones de dos dramas sentimentales a partir de sus traducciones francesas, El conde de Olsbach y La misantropía y el arrepentimiento. La primera, procedente de una pieza de Johann Christian Brandes a través de la versión francesa de A.–Ch. Friedel, fue representada con éxito en 1801 y publicada en el tomo VI del Teatro nuevo español (M., B. García, 1801). La segunda (M., Villalpando, 1801), que no fue representada, procede del célebre drama de August von Kotzebue, a través del arreglo en francés de Julie Molé y L. Bursay, en el que poco antes se había basado Dionisio Solís para su propia versión. García de Arrieta, según indica en su advertencia, quiso hacer esa nueva traducción para corregir las múltiples deficiencias de la versión de su predecesor.

 

Bibliografía

Francisco Aguilar Piñal, Bibliografía de autores españoles del siglo XVIII, Madrid, CSIC, 1986, IV, 93–96.

Ermanno Caldera, «Da Menschenhass und Reue a Misantropía y arrepentimiento, storia di una traduzione», Studi ispanici, Pisa, 1980, 187–209.

Francisco Cuevas Cervera, «El cervantismo de Agustín García de Arrieta», Ínsula 727–728 (2007), 10–11.

M.ª Jesús García Garrosa, «Traducciones de dramas franceses» en F. Lafarga (ed.), El teatro europeo en la España del siglo XVIII, Lleida, Universitat de Lleida, 1997, 295–323.

Aurora Miguel Alonso, La Biblioteca de los Reales Estudios de San Isidro de Madrid, Madrid, FUE, 1996.

Manuel Sánchez Mariana, «El primer director de la Biblioteca de la Universidad de Madrid: Agustín García de Arrieta», Pecia Complutense 5 (2006).

Franz Schneider, «Kotzebue en España. Apuntes bibliográficos e históricos», Modern Philology 25: 2 (1927), 179–194.

José Simón Díaz, Historia del Colegio Imperial de Madrid, Madrid, CSIC, 1959, II.

Inmaculada Urzainqui, «Batteux español» en F. Lafarga (ed.), Imágenes de Francia en las letras hispánicas, Barcelona, PPU, 1989, 239–260.

 

Inmaculada Urzainqui Miqueleiz