Dickinson

Dickinson, Emily (Amherst, 1830–Amherst, 1886)

Poeta estadounidense cuyo influjo, en los albores de la modernidad anglosajona, solo es comparable al de Edgar Allan Poe y Walt Whitman. Desde la poesía modernista norteamericana hasta las teóricas feministas, pasando por el activismo queer, en su obra, que consta de unos 1800 poemas y algo más de un millar de cartas, se acerca a la naturaleza, el amor, la comunicación o la muerte, entre otros temas, desde una poética que tiende más a lo visceral que a lo racional. A menudo mitificada por la semirreclusión voluntaria en que vivió, se ha visto a Dickinson como una poeta aislada y excéntrica, pero, aunque su obra muestra un mundo interior de agudas revelaciones, también descubre a una mujer conectada con las personas de su entorno y el pensamiento de su época, y a una gran lectora del canon narrativo y poético anglosajón. Aunque se había publicado algún poema anónimamente en vida de Dickinson, fue a partir de su muerte cuando fueron publicándose unos pocos centenares de poemas, en tres series a lo largo de diez años, y en 1893, algunas cartas. En 1914, su sobrina, Martha Dickinson Bianchi, publicó The Single Hound, un nuevo volumen de poemas; con todo, la obra de Dickinson no adquirió notoriedad hasta mediados de los años 1920, con la aparición de varios estudios, biografías y antologías. Para la poesía completa hubo que esperar hasta 1955, con la edición de Thomas H. Johnson, The Complete Poems of Emily Dickinson, que sigue considerándose de referencia, junto con otra publicada en 1998 por Ralph W. Franklin, The Poems of Emily Dickinson.

La primera traducción española de Dickinson es notablemente temprana y se debe a Juan Ramón Jiménez, probablemente con la colaboración de su esposa, Zenobia Camprubí. Se trata de los poemas «El alma que tiene huésped», «Resplandor de un acto heroico» y «Dos puestas de sol te mando», incluidos en Diario de un poeta reciencasado (M., Calleja, 1916–1917), reeditado en numerosas ocasiones.

Hasta finales de la década de 1940 no se vuelve a publicar su obra en España. Como es habitual en este período, algunas ediciones aparecieron en el extranjero. Es el caso de Ernestina de Champourcín y Juan José Domenchina, quienes, estando en México, tradujeron Obra escogida en 1946 para la editorial Centauro. Y también allí publicó la Editorial Letras en 1952 la canónica Antología de la poesía norteamericana, reeditada y ampliada en 1959 (México, UNAM), a cargo de Agustí Bartra, poeta barcelonés exiliado que había publicado el año anterior, en catalán, Una antologia de la lírica nord-americana. La versión catalana de 1951 presenta diferencias respecto a las castellanas: de aquella a estas se amplía de 14 a 29 y 40, respectivamente, el número de poemas antologados (más, por cierto, que de ningún otro autor).

Ya en 1954, la editorial El Arca (Las Palmas) publicó Seis poemas en versión de Ventura Doreste y, en 1957, la barcelonesa Juventud hizo lo propio con Poemas, con traducción de Marià Manent, reeditado en 1973 y 1979 en Visor (Madrid). La versión de Manent fue precisamente la que, por extensión (una cuarentena de poemas) y por su difusión, contribuyó en mayor medida a la ulterior fortuna de Dickinson en España. En rigor, la primera traducción de la poeta a cargo de Manent es la del poema «Go not too near a House of Rose–», el único que incluyó en su antología La poesía inglesa. Románticos y victorianos (B., Lauro, 1945); también incorporó cuatro poemas en La poesía inglesa (B., Janés, 1958). A mediados de siglo encontramos poemas suyos en Poesía norteamericana, 1900–1950, antologada en inglés por Louise Bogan en 1951 y traducida en 1955 por Joan Ferraté (B., Juventud).

De la década de 1980 datan una serie de antologías de entre una cuarentena y un centenar de poemas: la de Ricardo Jordana y María Dolores Macarulla (B., Bosch, 1980), con el título Cien poemas; la de Julia Castillo, Poemas (M., Libros Maina, 1984) y la edición crítica y bilingüe de Margarita Ardanaz, titulada también Poemas (M., Cátedra, 1987), reimpresa en múltiples ocasiones. Desde el cambio de siglo se ha producido un aluvión de traducciones, de las que destacan la Antología bilingüe (M., Alianza, 2001, trad. de Amalia Rodríguez Monroy); Crónica de plata (Poemas escogidos), también bilingüe (M., Hiperión, 2001, obra de Manuel Villar Raso), o La soledad sonora (Valencia, Pre–textos, 2001, trad. de Lorenzo Oliván). Se cuentan, además, tres ediciones de la poesía completa: la bilingüe de Ana Mañeru y María-Milagros Rivera (Poemas, M., Sabina, 2012–2015, 3 vols.); la monolingüe de Enrique Goicolea (Poesía completa, M.,  Amargord, 2013), y la bilingüe de José Luis Rey Cano (Poesías completas, M., Visor, 2013).

En estos últimos años y paralelamente a las obras completas, otros editores y traductores han profundizado en Dickinson mediante antologías temáticas: Poemas a la muerte (M., Bartleby, 2010), a cargo de Rubén Martín; Ese Día sobrecogedor. Poemas sobre el incesto (Sabina, 2017), de A. Mañeru y M.ª M. Rivera, o Antología botánica (M., Ya lo dijo Casimiro Parker, 2020), de Eva Gallud. Por otra parte, Emily Dickinson (1830-1886): comió y bebió las palabras preciosas (M., Ediciones del Orto, 2002) presenta tanto un ensayo biográfico como una antología de poemas, todo ello a cargo de A. Mañeru Méndez.

En cuanto a la correspondencia, se dispone de varias ediciones parciales, como Cartas poéticas e íntimas (1859-1886) (B., Grijalbo, 1996, trad. de Margarita Ardanaz); Cartas a T. W. Higginson. Selección (León, Universidad de León, 1999, por Cristina Blanco Outon); Cartas (B., Lumen, 2009, con varias reed.), en versión de Nicole d’Amonville Alegría, quien también tradujo la antología 71 poemas para la misma casa en 2003, y Cartas de amor a Susan (Sabina, 2021), obra de Ana Mañeru, Arantxa Azurmendi y Carmen Oliart.

También encontramos publicadas en España diversas traducciones llevadas a cabo por traductores hispanoamericanos. Así, se incluyen algunos poemas en la antología del nicaragüense José Coronel Urtecho titulada Panorama y antología de la poesía norteamericana (M., Escelicer, 1949; reeditada y ampliada, junto a su compatriota Ernesto Cardenal, con el título de Antología de la poesía norteamericana, M. Aguilar, 1963). De la argentina Silvina Ocampos, Poemas (B., Tusquets, 1985; reed. Austral, 2019), con prólogo de Jorge Luis Borges; del mexicano Alberto Blanco, 55 poemas (M., Hiperión, 2010); del argentino Rolando Costa Picazo, Oblicuidad de Luz: 95 poemas (Valencia, Universitat de València, 2011).

En catalán, la primera traducción data de 1951, los ya mencionados poemas incluidos por A. Bartra en Una antologia de la lírica nord-americana (México, Edicions Lletres), reeditada en 1983, ya en Cataluña (Vic, Eumo). Para entonces ya se habían publicado las versiones del también mencionado M. Manent, que son las que gozaron de mayor difusión. En 1955 había incluido tres poemas en su antología Poesia anglesa i nord-americana (B., Alpha) y en 1979 vio la luz Poemes (B., Edicions 62), que incluye la mayor parte de los poemas recogidos en las sucesivas ediciones de la antología homónima en castellano. Desde entonces, como en castellano, y sobre todo desde el cambio de siglo, se han publicado numerosas traducciones de Dickinson, como las antologías parciales Poemes de passió i enginy (Manacor, Casa de Cultura, 1988, trad. de Joan Cerrato i Rosselló); Jo no sóc ningú! Qui ets tu? (B.–Vic, Café Central–Eumo, 2002; trad. de D. Sam Abrams); Amherst: LXXX poemes (Paiporta, Denes, 2004, trad. de Carme Manuel Cuenca y Paul Scott Derrick); Aquesta és la meva carta al món. Poemes escollits (B., Proa, 2017, trad. de Marcel Riera) o L’enigmàtica consciència (B., Poncianes, 2017, trad. de Míriam Cano). En euskera y en gallego se ha publicado un único libro en cada idioma; en ambos casos, selecciones poéticas bilingües. La versión vasca, Emily Dickinson (Zarautz, Susa, 2014), fue traducida por Ángel Erro y la gallega, de título Dickinson (Lugo, Tris Tram, 2004), por Carlos Coira. Al asturiano, se han vertido los «Ventiocho poemes d’Emily Dickinson» incluidos en la revista Campu de los Patos (n.º 3, 2012), en traducción de Pablo Antón Marino Estrada.

 

Bibliografía

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Juan Carrillo del Saz