Juvenal, Décimo Junio

Juvenal, Décimo Junio (Aquino, ca. 60 d. C.–Roma, ca. 132 d. C.)

Poeta latino; empezó a escribir sus Sátiras bajo la tiranía de Domiciano, por lo que hubieron de esperar a ser editadas en tiempos de Trajano y Adriano, entre el 112 y el 132 d. C. No ha gozado de gran fortuna entre los traductores españoles. Si dejamos a un lado las versiones parciales del siglo XVI, la primera traducción completa en prosa es la de Diego López, intercalada en su comentario o «Declaración magistral» sobre el satírico (Madrid, 1642).

Hasta 1817 no apareció una verdadera traducción de Juvenal, la de Luis Folgueras y Sión (M., C. Piñuela), que planteaba en el prólogo la cuestión, siempre debatida por los traductores de poetas clásicos, de si es mejor servirse del verso o de la prosa. Eligió el verso libre alternando endecasílabos y heptasílabos sin apartarse mucho del original; pero eliminó la ix y otros pasajes obscenos de la vi por escrúpulos morales. El resultado combina torpeza y prosaísmo con grandes aciertos, como la versión de la iii, que probablemente conocieron y usaron Larra y Ruiz Aguilera en sus imitaciones posteriores. A finales de siglo, Francisco Díaz Carmona (Sátiras de Juvenal y Persio; M., Viuda de Hernando, 1892) siguió el ejemplo de Folgueras en la eliminación de la ix y en el uso de endecasílabos y heptasílabos libres; pero recurrió también para la traducción de otras al terceto encadenado, empleado por los satíricos españoles desde Lupercio Leonardo de Argensola. Es menos fiel al original que Folgueras, pues la plasticidad de Juvenal se pierde en la fluidez de sus versos castellanos.

En el siglo XX, los traductores, en su mayoría filólogos, han optado por la prosa y la fidelidad al contenido. Su visión menos estrecha y moralista de la literatura los ha salvado de la tentación de eliminar las obscenidades presentes en las Sátiras. Se dirigen a un público culto o especializado y junto con la traducción dan su interpretación de la obra en notas e introducciones. Cabe destacar la de Manuel Balasch (M., Gredos, 1991), basada en su propia edición, con traducción al catalán de la Fundació Bernat Metge (Barcelona, 1961–1962) y la de Francisco Socas (M., Alianza, 1996; reed. 2010). Con el texto latino aparecen las de Roberto Heredia (México, UNAM, 1974) y Bartolomé Segura (M., Alma Mater, 1996). En la primera década del XXI no se aprecian cambios en esta tendencia: sin texto latino existe la de Salvador Villegas (M., Ediciones Clásicas, 2002), mientras que la de Rosario Cortés Tovar es bilingüe (M., Cátedra, 2007).

 

Bibliografía

Rosario Cortés Tovar, «Introducción» en Juvenal, Sátiras. Ed. de R. Cortés Tovar, Madrid, Cátedra, 2007, 170–189.

Marcelino Menéndez Pelayo, Bibliografía hispano–latina clásica, Madrid, CSIC, 1951, VII, 23–41.

 

Rosario Cortés Tovar